UTE Variante Túnel

El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado la formalización del contrato para la redacción del proyecto y ejecución de las obras de las instalaciones de señalización y telecomunicaciones de la variante oriental y del nuevo complejo ferroviario de Valladolid, por un importe de 14, 7 millones de euros más IVA: en enero se declaró un total de 17,8 millones de euros, impuestos incluidos.

Las instalaciones de señalización y telecomunicaciones de la Variante Oriental de Mercancías de la Red Arterial Ferroviaria de Valladolid fueron objeto de un contrato que Thales Variante UTE recibió autorización del Consejo de Administración de Adif para su redacción y ejecución a finales de enero.

Según Europa Press, el contrato tiene como objetivo dotar a la Variante de «las instalaciones de seguridad y fiabilidad necesarias» para garantizar su funcionalidad y permitir la circulación tanto de trenes de mercancías como de viajeros.

Según Adif, esto incluye dotar de las infraestructuras necesarias para su uso con Bloqueo Automático Banalizado y utilizar el sistema ASFA como sistema de protección de trenes.

Todos los trenes de mercancías, que suponen el 25% del tráfico ferroviario actual en la estación de Valladolid-Campo Grande, podrán pasar por la Variante una vez esté en funcionamiento.

La obra, que ha sido adjudicada a la UTE (Unión Temporal de Empresas) formada por Thales España GRP y Thales-Sistemas de Seguridad, se dividirá en varias fases, incluida la redacción del proyecto constructivo, cuya fase 1 consistirá en conectar acceso a FASA-Renault con la Variante por el lado norte (conexión con Bifurcación Río Pisuerga) en cuanto a instalaciones de señalización y telecomunicaciones, y la fase 2, que implicará la conexión.

Con una longitud de 17,5 kilómetros y un diseño que permite velocidades de tren de 160 km/h, la Variante Este es la variante más larga.
Un túnel de 2.192 metros y un viaducto (Viaducto de los Tramposos) de 1.130,5 metros son considerados «hitos estructurales» por Adif.

La compañía explicó que el objetivo del proyecto era construir una variante ferroviaria de ancho convencional al este de Valladolid que conectaría con la línea Madrid-Hendaya en doble vía y se utilizaría para el tráfico de mercancías.